La web ha evolucionado para adaptarse a las preferencias y necesidades individuales de los usuarios. Los algoritmos de recomendación y la personalización han permitido una experiencia web más personalizada, ofreciendo contenido relevante y adaptado a los intereses de cada usuario. Esto ha mejorado la eficiencia y la comodidad al acceder a la información y los servicios en línea.
A medida que avanzamos hacia el futuro, la evolución de la web se espera que se beneficie de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, la realidad virtual/aumentada y la Internet de las cosas. Estas tecnologías tienen el potencial de proporcionar experiencias web más inmersivas, intuitivas y conectadas.
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